miércoles, 19 de marzo de 2008

Murió Arthur Clarke, autor de "2001: Odisea del espacio"

El escritor inglés logró fama internacional luego de que Stanley Kubrick llevara su novela al cine en 1968.

Falleció por una afección pulmonar en Sri Lanka, su país adoptivo, alos 90 años. Arthur C. Clarke, un autor de ciencia ficción visionario que ganó reconocimiento mundial con más de 100 libros sobre el espacio, la ciencia y el futuro, falleció el miércoles en su país adoptivo de Sri Lanka,
indicó un asesor. Tenía 90 años.

Clarke, que desde la década de 1960 luchó con el síndrome postpolio, y en ocasiones empleaba una silla de ruedas, murió a la 1:30 de la madrugada tras sufrir problemas respiratorios, dijo su ayudante Rohan De Silva.

Clarke se mudó a Sri Lanka en 1956, atraído por su interés en el buceo, que consideraba lo más cerca que podía acercarse a la carencia de gravedad en el espacio.

"Funciono perfectamente bajo el agua", dijo alguna vez.

Coautor junto con el cineasta Stanley Kubrick de la película "2001: Una odisea del espacio", Clarke era considerado mucho más que un autor de ciencia ficción.

A él se le acredita el concepto de las comunicaciones satelitales en 1945, algunas décadas antes de que estas se convirtieran en una realidad.

Las órbitas geosincronizadas, que mantienen a los satélites unidos en una posición fija con respecto a un punto en la tierra, son llamadas órbitas Clarke.

También acompañó al locutor estadounidense Walter Cronkite como comentarista de las misiones Apolo a la luna hacia finales de la década de 1960.

Las obras de Clarke que no son de ciencia ficción, sobre viajes espaciales y sus exploraciones a la Gran Barrera de Arrecifes y al Océano Indico, le permitieron ganarse el respeto del mundo científico, y en 1976 se convirtió en socio honorario del Instituto Estadounidense de Aeronáutica y Astronáutica.

Sin embargo, fueron sus libros de ciencia ficción los que le dieron la mayor fama y sus mayores alegrías.

"Algunas veces me preguntan cómo me gustaría ser recordado. He tenido una carrera diversa como escritor, como explorador submarino y como promotor del espacio. De todas ellas, me gustaría ser recordado como escritor", señaló Clarke recientemente.

A partir de la década de 1950, Clarke se convirtió en un escritor prolífico de obras tanto de temas reales como de ciencia ficción, y en ocasiones llegó a publicar hasta tres libros en un año.

Publicó su popular éxito de librería "3001: The Final Odyssey" cuando tenía 79 años.

Algunos de sus libros más conocidos son "Childhood's End", de 1953; "The City and The Stars", de 1956; "The Nine Billion Names of God", de 1967; "Rendezvous with Rama", de 1973; "Imperial Earth", de 1975; y "The Song of Distant Earth", de 1986.

Cuando Clarke y Kubrick se reunieron para desarrollar el guión de una película sobre el espacio, utilizaron como ideas básicas algunas de las obras cortas de Clarke, incluida "The Sentinel", escrita en 1948, y "Encounter in the Dawn".

A medida que avanzaba el trabajo en la creación del guión, Clarke también desarrolló la novela sobre la historia, e hizo secuelas tituladas "2010", "2061" y la de "3001: The Final Odyssey".

Ganó el premio Nebula, que otorgan los Escritores de Ciencia Ficción de Estados Unidos en 1972, 1974 y 1979; el premio Hugo de las Convenciones Mundiales de Ciencia Ficción de 1974 y 1980, y en 1986 fue nombrado el Gran Maestro de los Escritores de Ciencia Ficción de Estados Unidos.

También ganó el galardón CBE en 1989.

Nacido en Minehead, en el occidente de Inglaterra, el 16 de diciembre de 1917 e hijo de un campesino, Arthur Charles Clark se volvió adicto a la ciencia ficción a temprana edad y publicó sus primeros escritos en una revista escolar cuando era adolescente. Luego trabajó como oficinista.

Se casó en 1953, se divorció en 1964 y no tuvo hijos.

A continuación se trata de describir el argumento de la película tal y como ocurre en pantalla para un nuevo espectador, sin adelantar ni explicar acontecimientos, dejando para la sección Interpretaciones las explicaciones más detalladas pero, como advertía el propio Kubrick, que son campo libre para la especulación. [MÁS]...

Tabla de contenidos

La interpretación habitual (que es, además, lo que se cuenta en la novela), nos habla de una civilización extraterrestre avanzada que hace unos 4 millones de años pasó por la Tierra en una expedición y descubrió vida avanzada no inteligente en algunas especies como los primates que poseían el potencial de desarrollar la inteligencia, aunque la selección natural no podía asegurarlo.



EL AMANECER DEL HOMBRE
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Así, esta civilización deposita un monolito (TMA-0) en uno de los grupos de primates más avanzados, sembrando o dando un impulso a la aparición de la inteligencia en ellos. A la vez enterraron otro monolito en la Luna (TMA-1) y dejaron un tercero en órbita de Júpiter, de forma que el TMA-1 sirviera de aviso (centinela) en el caso de que la semilla de la inteligencia diera lugar en el futuro a una especie que comenzara la exploración espacial. Así, llegado el caso se descubriría el monolito lunar y al recibir el primer rayo de sol se enviaría una señal al otro monolito en los alrededores de Júpiter, que en sí misma es una puerta estelar, una puerta a pasillos interestelares que permiten la comunicación y el viaje a lugares muy alejados del universo.

con diálogos
con diálogo
con diálogo imagen retocada (sin reflejos)

TMA - 1
(Anomalía Magnética de Tycho - 1)

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Durante el viaje del Discovery a Júpiter, solo el superordenador HAL 9000 y los tripulantes hibernados conocen la verdadera misión: investigar el destino de la señal del TMA-1 en los alrededores de Júpiter. Ni David Bowman ni Frank Poole, los tripulantes despiertos del Discovery, conocen la misión y eso implica que HAL 9000 de alguna manera está mintiendo, ocultando información a los humanos, mientras que por otro lado se supone que un ordenador debe ser perfecto, infalible y que no puede tener ese tipo de comportamientos.

con diálogo
con sonido
con diálogo con diálogos

MISIÓN JUPITER
18 MESES DESPUÉSgalería  anteriorsiguiente galería

Es una de las paradojas teóricas de la inteligencia artificial, que en el caso de HAL le lleva a desórdenes psicológicos y en un momento dado le arrastran en una cascada de mentiras y engaños (por otra parte, algo muy habitual en humanos). Dado que los humanos llegan a plantearse la desconexión de HAL 9000 y ya que él se considera el único capaz de llevar a cabo con éxito la misión (egocentrismo y megalomanía), llega a la conclusión de que los humanos están poniendo en riesgo la misma y que son prescindibles, por lo que intenta eliminarlos a todos. David Bowman aprovecha sus recursos humanos para "vencer" a HAL 9000 y consigue desconectarlo, pero queda como único superviviente humano e intenta proseguir la misión de todos modos.




JUPITER
Y MÁS ALLÁ DEL INFINIT
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El monolito de los alrededores de Júpiter es una puerta estelar, una entrada a pasillos que conectan puntos distantes del universo. La llegada de David Bowman al monolito provoca la apertura de la puerta y David comienza un viaje a través de estos pasillos, que lo llevan a algún punto del universo donde "vive" la civilización que sembró los monolitos hace 4 millones de años. Allí sitúan a David en un entorno lo más familiar posible, reconstruido a partir de transmisiones de televisión de la Tierra captadas y reenviadas, se supone, durante la exposición del TMA-1 en 1999. David es analizado para ver si la especie tiene las capacidades necesarias para dar el siguiente paso en la escala de la inteligencia y parece que sí, con lo que David es transformado en un nuevo tipo de vida, más inteligente y sin las limitaciones del cuerpo físico, lo que es simbolizado por el feto humano y finalmente devuelto al entorno de la Tierra. [MÁS]...

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